Y cambiaré tus susurros por los de una caracola, y tus besos por los del viento, y tus caricias por las de mis sabanas, y tu risa por millones de carcajadas que me saquen para cuando tú no estés, y también cambiaré tus abrazos por los de mi bufanda, y tú voz por mi canción favorita. Pero y tu presencia..., ¿quien la sustituirá?..
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